Un sentido minuto de silencio abrió el homenaje con el que ha latido una vez más el recuerdo del joven concejal del PP. Miembros de la Corporación Municipal, efectivos de la Guardia Civil, Policía Local y la Agrupación local de Protección Civil, así como las personas que se unieron al sencillo acto celebrado a última hora de la tarde de este jueves, 10 de julio, han mostrado así su reconocimiento a este “símbolo de convivencia y unidad que representa lo mejor que hemos sabido construir socialmente como nación que lucha contra sus enemigos. El suelo ético sobre el que debemos construir nuestras libertades”.
Tras depositarse una corona de laurel ante el monolito a las Víctimas del Terrorismo, el alcalde, Santiago Villena, leyó el manifiesto de la Fundación Miguel Ángel Blanco que reconoce que “respetar el espíritu de Ermua, respetar a Miguel Ángel Blanco, exige no claudicar ante la legitimación del terrorismo, ante su blanqueamiento, ante la impunidad que los terroristas y sus cómplices imponen a día de hoy”.
Reafirmando así el compromiso del lema de este año, en el citado texto también se subraya que “no vamos a olvidar los hechos, ni la maldad de los asesinos, ni la inocencia de esta víctima que llevamos en el corazón como símbolo de todas y cada una de los miles de víctimas que han tenido que sufrir el zarpazo terrorista durante más de 50 años… No vamos a olvidar que toda la sociedad española vivió bajo el yugo de ETA, ni el gran sacrificio de los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado que en primera línea lucharon sin descanso contra esta lacra criminal”.
Las notas del himno nacional pusieron el broche final a esta sencilla pero muy emotiva demostración de cómo el pueblo de Valdemorillo tiene presente a Miguel Ángel Blanco, “porque somos y seguiremos siendo memoria”, como recalca el regidor.