¿Cómo explicaríais JP Financial 2024 a alguien que entra por primera vez a la oficina de Claudio Coello 37?

Javier Rumbo: Le diríamos que somos el traductor entre él y el mundo financiero. Nosotros no colocamos productos; construimos estrategias. Y, sobre todo, queremos que entienda cada decisión que toma con su dinero.

Pedro Muñoz: Exacto. Nuestro éxito no es que firme un contrato, sino que dentro de cinco años siga con nosotros, tranquilo, satisfecho y con una estrategia que le permita dormir bien por las noches.

Habéis insistido en que el inversor español está cambiando. ¿En qué lo notáis?

J.R.: La gente ya no traga con que su dinero esté parado al 0,25%. Empiezan a comparar, a preguntar, a exigir. El cliente quiere saber qué es un fondo indexado, qué diferencia hay entre un producto tradicional y uno alternativo, o cómo puede proteger su jubilación.

P.M.: Y quieren independencia. Ya no vale lo de “esto es lo que toca porque lo dice el banco”. El ahorrador español quiere algo más inteligente, más claro y más respetuoso con su dinero.

Habéis dicho varias veces que queréis ser la mejor empresa de España. No la mejor financiera. La mejor empresa, punto. ¿Qué significa eso?

P.M.: Significa que el éxito no se mide solo en volumen invertido. Para nosotros, éxito es que un empleado entre por la puerta de Claudio Coello 37 y sienta tres cosas:

1. Que puede ser él mismo.
2. Que está creciendo personal y profesionalmente.
3. Que forma parte de algo grande.

J.R.: Queremos un sitio donde se respire buen ambiente, donde haya ambición, pero también humanidad. Donde el talento pueda desarrollarse sin toxicidad, sin gritos y sin guerras internas.

¿Cómo se traduce eso en la cultura interna?

J.R.: En coherencia. Transparencia hacia el cliente y hacia el equipo. Sin agendas ocultas. Sin presiones absurdas.

P.M.: Y en participación real. Los empleados tienen voz. Deciden, opinan, aportan. No queremos soldados. Queremos profesionales que quieran hacer carrera con nosotros. Y sí, también celebramos los éxitos: desde una operación cerrada hasta que un asesor se compra su primera casa porque ha aprendido a planificar su propio ahorro.